CIRCULO
CÍRCULO
Ya he terminado el ascenso
del círculo de mis días.
Inicio el retorno forzoso
al punto de partida.
Es que es más fácil subir
con la mente ilusionada
creyendo que se escalan los sueños;
que se realizan
en la cúspide vislumbrada
cuando niños...
Mas, al llegar y encontrarse
con que todo ha cambiado
desde ese punto de vita
ya es difícil mantener el equilibrio
y se comienza con pesadez
el descenso
por el camino torturante del abismo;
por las sombras calladas
que encierran la tristeza
de los años que se han ido.
Pero el ciclo vital debe cerrarse.
El círculo no admite detenerse.
El tiempo, mi tiempo
desciende conmigo.
JUANA C. CASCARDO
de la Antología: OCHO EN LA POESÍA
Ed. Amaru octubre 1979 y SOMOS TIEMPO... Poemas homenaje
y otros poemas - edic. AMARU, 2005
REDONDEZ
ResponderEliminarTodo es un círculo en el mundo.
Los planetas, la pelota... todo rueda.
El tiempo gira en redondo,
redondo es el sol y la madera.
Las flores caben en la esfera,
como en esferas cae la nevada.
Gira la sangre en mis redondas venas
que el círculo recorre entusiasmada.
El viento también baila en redondo;
la ola viene a morir en una rueda
de espuma blanca que, en redondo,
muestra redondas burbujas que la integran.
Los ojos miran a través de una lente,
por esa redondez pasa la vida,
mostrando a su vez eternos juegos
que utilizan el círculo para verla cumplida.
La nube, los dedos, nuestras vísceras,
pasan por ese mágico circuito,
que permanentemente manifiesta
querer catapultarse al infinito.
Para llegar a él también seguimos
un recorrido translativo en círculo
gozando distintas estaciones
o rotando sobre un eje movedizo.
El nido, la casa del hornero,
las danzas amorosas con sus vuelos,
son ballets de murmullos giratorios
que provocan atracciones de pañuelos.
Y así podemos recorrer la vida
buscando la rueda que nos lleva
a encontrar el por qué que nos inquieta
o llegar al punto aquel que nos consuela.
LAURA BEATRIZ CHIESA
extraído de su libro VOZ DE TINTA - Eds Dei Genitrix - 1995